8 dic 2009

Los mexicanos debemos limpiar nuestra casa

Revelaciones

Margarito Escudero Luis

Recientemente el presidente Felipe Calderón propuso al Congreso que los diputados y alcaldes puedan reelegirse por un período más.

La propuesta llega justo cuando estamos a punto de cumplir cien años de Revolución, gesta que nace luego de que Porfirio Díaz se “colgó” 30 años como presidente.

Una de las consignas que se enarbolaron en aquel tiempo fue acuñada por Francisco I Madero, “Sufragio Efectivo, No Reelección”, precisamente la que ahora se pretende eliminar, poco a poco.

Claro que entre los diputados, senadores y alcaldes la propuesta fue muy bien recibida. A esos “revolucionarios” y “sacrificados” ciudadanos no les cae mal seguir incrustados en la nómina gubernamental y tienden a olvidar el discurso aquel de la Revolución Mexicana.

Como siempre, la clase política repartiéndose el pastel y dejando de lado las opiniones y necesidades de la población.

Removerlos

Algunas voces han salido al paso. Es verdad que nuestra vida social y política debe avanzar, evolucionar en la búsqueda de la perfección, pero los políticos están acostumbrados a servirse con la cuchara grande y, aquello que no vaya con sus intereses simplemente lo ignoran.

Algunos ciudadanos opinan que está bien que se reelijan por un período más diputados y alcaldes, la ciudadanía verá la calaña del político en funciones y decidirá si vota por él otra vez o no.

Pero, la propuesta ciudadana va en el sentido de que, si el funcionario electo no cumple las expectativas de la sociedad, sea removido de su cargo; es decir, se pide que se hagan las modificaciones a la Constitución para que un funcionario electo popularmente, pueda dejar el cargo por inepto o corrupto, y no tener que soportarlo todo el tiempo que dure el período.

Sólo sus conveniencias

Porque siempre hemos visto que se pasan los mandatos constitucionales por el arco del triunfo y la única ley que reconocen y aplican es la ley del embudo.

Así vemos políticos que no renuncian al cargo, pues la Constitución se los impide. Pero eso no es obstáculo, cuando se acerca la otra elección simplemente “piden licencia”, que técnicamente es una renuncia al cargo y tranquilamente se van a seguir gozando de las mieles del poder.

Y sólo sus conveniencias funcionan, ni importa lo que diga la gente que vota, eso no importa pues saben que en las campañas todo se le olvida a la población que se conforma con más y más promesas.

El caso Juanito

Un claro ejemplo de ello fue en su momento el juicio de desafuero contra Andrés Manuel López Obrador, cuando fue Jefe del Gobierno Capitalino.

Como Vicente Fox, entonces presidente de México decidió “partirle el queso” a AMLO, se manipuló la ley, se utilizaron ciudadanos ingenuos, se buscó por todos lados, finalmente López Obrador fue desaforado para que luego toda la estructura del poder quedara en ridículo, pues el ex Jefe de gobierno siempre tuvo la razón.

Ahora se prepara el ataque contra Rafael Acosta “Juanito”, quien fuera utilizado por el mismo AMLO para imponer en la delegación de Iztapalapa a Karla Brugada.

La Asamblea de Representantes del DF, que no es otra cosa que la Cámara de diputados Local, que está controlada por la mayoría perredista, está preparando la forma para destituir a Juanito.

El caso es que este individuo ya no va con los intereses perredistas, “se les salió del huacal” y afectaría la imagen y control que ellos tienen sobre Iztapalapa. No lo corren por inepto o corrupto, si no porque no es afín a sus intereses; aquí los intereses de la comunidad no cuentan, no valen, sólo les interesa mantener el control total.

Desvotar

Entonces, la ciudadanía debe ir buscando la manera de contrarrestar el inmenso poder que tienen los políticos hoy en día, proponer nuevas formas de participación, pues todo lo acapararon ellos y una forma importante, sería poder desvotar. Es decir, recurrir a una especie de calificación del servidor público y votar para quitarle voto que se le dio para que ocupara el cargo y que se vaya donde no perjudique a nadie.

Pero esto no solo para diputados y alcaldes; sino para todo servidor público.

Limpiar la casa

Porque vea usted. Muchas, pero muchas personas se sienten ultrajadas, ofendidas, defraudadas por servidores públicos, se organizan, protestan y exigen que el funcionario sea cesado y ¡No pasa nada!, los jefes se apresuran a defender al susodicho y buscan la manera que los perjudicados sean los que protestan.

Muchos ejemplos hay con malos maestros, directores de escuelas, agentes de tránsito, policías de todos los rangos, servidores de ventanillas, diputados y presidentes de la República que prometieron servir al pueblo y no lo hacen, como el caso del actual presidente Felipe Calderón que ofreció no subir los impuestos y no cumplió, o el “diputado de la gente”, Rafael García Bringas que no dio la cara a la gente cuando votó por aumentar impuestos, sirviendo a los intereses de su partido; en fin… Hay mucho de esto, donde todos los mexicanos que ya estamos hartos, debemos organizarnos para poner fin a este estado de cosas, pues ya es necesario quitarnos este mugrero. Debemos limpiar nuestra casa.

Comentarios: mexmel@gmail.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario