Margarito Escudero Luis
Nuevamente se sintieron sismos en el sur de Veracruz, la
alarma cunde entre la población, pero hasta el momento no hay ninguna
explicación que permita a la ciudadanía entender las causas que están generando
los constantes movimientos telúricos en esa región de la Entidad.
Las autoridades en general, las encargadas de estudiar estos
fenómenos, las municipales, estatales y federales, deberían explicar a la
población la causa real del incremento de temblores, ya que en los últimos años
ha temblado con mayor frecuencia que en años anteriores.
En el 2016, el Partido del Trabajo (PT), que en ese entonces
encabezaba el Diputado Fidel Robles Guadarrama (QEPD), emprendió una campaña de
Opinión Pública, con el objetivo de informar, hacer conciencia a la sociedad sobre
problemas y asuntos que las autoridades ocultan y al mismo tiempo, plantear y
recoger soluciones de la población que permitan la Reconstrucción del Estado de
Veracruz.
La idea era defender el territorio y los recursos naturales
ante proyectos devastadores como las minas, las hidroeléctricas y el uso de
técnicas petroleras como fracking
que afectan y afectarán a los veracruzanos del campo y las ciudades.
A propuesta del Diputado Robles Guadarrama, 20 diputados
locales de todos los partidos políticos firmaron una iniciativa de ley para
prohibir el fracking en todo el
país.
Así, se buscó alertar a la ciudadanía del sur del Estado sobre
una serie de fenómenos geológicos de riesgo para los ciudadanos, entre los que
destacan el altísimo incremento del número de sismos con epicentros localizados
sobre todo en la llamada Región Olmeca que comprende los 27 municipios del
extremo sur del estado.
Es necesario destacar que en 2015 se presentaron 230 sismos
con epicentros en el sur de Veracruz, según el Servicio Sismológico Nacional
(SSN) y el Observatorio Sismológico y Vulcanológico de la UV, con magnitudes de
3 a 4.5 grados Richter. (Estos organismos públicos no reportan los sismos
menores de 3 grados Richter).
De 1928 a 2006 el número de sismos máximos anuales eran en
promedio de 21, según el registro SSN.
El incremento en más de MIL POR CIENTO en el número de
sismos en los últimos 10 años (la mayor actividad en los últimos dos años) debe
preocuparnos y ocuparnos a los que vivimos en el sur de Veracruz, junto al
Túnel Sumergido de Coatzacoalcos, a ductos e instalaciones petroleras que se
pretenden multiplicar en los próximos años.
La instalación de nuevos ductos petroleros, la falta der
mantenimiento de cientos de kilómetros de ellos que atraviesan campos y
ciudades, la construcción de infraestructura industrial de edificios,
carreteras, puentes para resistir esta nueva y elevada sismicidad, no es un
asunto menor.
La actividad petrolera con tecnología reciente, genera
sismos. Esto es un hecho aceptado en muchos estudios especializados que señalan
que se requieren dos condiciones para que se provoque un sismo por actividad
humana: 1) la extracción de crudo y la extracción o inyección de líquidos o
gases en el subsuelo y 2) la existencia cercana de fallas geológicas conocidas
o desconocidas pero activas o activadas por la actividad extractiva.
En el Sur del estado existen ambas condiciones probadas:
1.
Durante los últimos 10 años, además de la
extracción de millones de barriles de hidrocarburos, y millones de metros
cúbicos gas y aguas producidas, se han inyectado masivamente (miles de metros
cúbicos por día), residuos de la industria petrolera en los siguientes 34 pozos
de Inyección o Pozos Letrina, de acuerdo al Director de PEMEX, ubicados en los
municipios del sur de Veracruz.
2.
2. Existen dos fallas geológicas de entre 5 y 6
kilómetros de longitud al sureste de la obra del Túnel Sumergido de
Coatzacoalcos y a pocos kilómetros de los 17 pozos de inyección ubicados entre
Cuichapa y Moloacán y a las cavernas de Tuzandépetl, donde se almacena crudo y
gas a presión.
Los sismos y el rompimiento del
domo salino que se confundió hace unos meses con la emergencia de un volcán
entre Moloacán y las Choapas, pueden estar siendo provocados por la actividad
petrolera no informada por PEMEX y las empresas privadas que actúan desde hace
años en la zona.
De acuerdo a la Secretaría del
Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), las condiciones de las capas
profundas de la tierra con enormes domos de sal en todo el sur de Veracruz, son
una condición para no usar técnicas petroleras como el fracking que usa la inyección a presión de hasta 29 millones de
litros de agua por pozo y cientos de miles de litros de substancias
contaminantes.
Lo ideal sería que la actividad
petrolera se realice con técnicas que no dañen al medio ambiente y sobre todo
informando con la verdad y oportunamente a la población de los riesgos que
corre.
Las autoridades deben estar
enteradas de la actividad de las empresas que practican el fracking en la zona
sur de Veracruz, pero han guardado un cómplice silencio, permitiendo que el
pánico se apodere de la población cada vez que se mueve la tierra a más de
cuatro grados Richter.
Por lo tanto los ciudadanos
deberíamos mantenernos en alerta, pues no sabemos cuándo pueda ocurrir un sisma
de mayor magnitud y nos tome desprevenidos, pues cuando un evento se hace
constante, nos acostumbramos.
Por lo pronto podemos asegurar
que las autoridades mantienen un silencio criminal.
mexmel@gmail.com
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