Margarito Escudero Luis
Mocharle la mano al que robe fue una expresión vertida por
el candidato independiente a la presidencia de la República, durante el debate
celebrado el pasado domingo.
Jaime Heliodoro Rodríguez Calderón, quien se hace llamar “El
Bronco”, dio muestra del resultado de su afición a leer el Libro Vaquero,
historias ficticias del viejo oeste, de donde seguramente recogió la imagen que
ahora pretende vender a los mexicanos.
Amputar miembros a seres humanos como castigo, una práctica
de los pueblos antiguos, por lo que, al proponer su aplicación en este azaroso
siglo XXI, sería un retroceso, por lo tanto, la actitud del autollamado Bronco
es retrógrada.
La misma actitud, con matices diferentes, planteó el
candidato del PAN y aliados Ricardo Anaya, usar la fuerza, con nuevas
estrategias y tecnología; es decir más violencia pero moderna, con drones y
armas de última generación.
El resto de los candidatos que participaron en el debate
dominical, niegan la posibilidad de una salida pacífica, sólo porque la
propuesta no sale de ninguno de sus cómplices.
La propuesta de serenar al país, de reducir la violencia viene del candidato de Morena, a quien los otros cuatro debatientes le niegan cualquier beneficio de dudas.
Han olvidado que el uso de la fuerza ya se empleó en el
país, iniciada por Felipe Calderón, esposo de una de las participantes, y dejó
resultados desastrosos en el país.
Al parecer el chico maravilla, involucrado en escándalo de
lavado de dinero, pretende continuar con la ola de violencia en México,
sembrando miedo, provocando más muertes de jóvenes mexicanos, de secuestros y
levantones, porque los delincuentes mejor organizados, no se quedarán de brazos
cruzados viendo como los drones vuelan cerca de sus cabezas y las modernísimas
armas los van aniquilando.
México necesita volver a la tranquilidad, necesita paz para que los ciudadanos puedan desarrollar todo su potencial y lograr que el país pueda retomar el prestigio internacional que, por las políticas equivocadas y por complicidades de gobernantes con la delincuencia, perdió ante la comunidad internacional. Los mexicanos ya no queremos violencia, zozobra, angustia ni luto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario